LAS ORGANIZACIONES COMO SEMILLA DE TRANSFORMACIÓN DE LA ECONOMIA SOCIAL Y SOLIDARIA

Articulo original publicado en catalán el 10/10/2022 


Ésta es la reflexión que compartí el pasado 3 de octubre de 2022, en la ponencia inaugural de la Semana de la Economía Social y Solidaria en Mataró. 

Una reflexión que nace desde el conocimiento teórico; desde las ideas, visión y sueños; y desde la experiencia del proceso de transformación organizativa que hace unos años estamos impulsando y construyendo desde la Fundació el Maresme.

Ideas, visión y sueños sobre cómo las organizaciones de la Economía Social y Solidaria (ESS) pueden contribuir a construir un mundo más justo, menos desigual, donde las personas y su bienestar sea el centro del modelo económico.

La principal idea de esta reflexión es que la forma en cómo se organizan empresas, organizaciones, entidades, no es neutra, y que si realmente quieren ser activas en la transformación social, ésta debe iniciarse en el seno de las propias organizaciones. Las organizaciones deben ser espejo de lo que quieren generar en su entorno.

La Economía Social y Solidaria aparece como modelo alternativo contra la desigualdad que genera el actual sistema económico. Propone prácticas alternativas a éste, mediante la aplicación de valores universales como la equidad, la justicia, la solidaridad, el compromiso con el entorno y la democracia. Es un modelo económico que pone en el centro a las personas y su bienestar por encima del lucro y el dinero. Sitúa el dinero como una herramienta para llegar a ese fin, y no el fin de la economía por sí misma.   Elementos comunes de las entidades de ESS son que se da importancia no sólo en lo que hacen, sino también en el cómo lo hacen. En éste cómo lo hacen que se definen cinco grandes ejes:   gobernanza democrática; calidad laboral; sostenibilidad; compromiso con la comunidad; y equidad.

La gobernanza democrática es un marco de gobierno de las organizaciones que incorpora las voces de los distintos grupos de interés. Se fundamenta en modelos organizativos en los que la forma de gestión se basa en la autogestión y autoorganización de equipos de trabajo; modelos en los que la toma de decisiones es compartida, en que las decisiones no las toman una persona de forma individual, sino que se toman en equipos; modelos inclusivos y que a la vez empoderan a las personas individual y colectivamente; modelos basados ​​en la construcción colectiva, entendiendo ésta no sólo como la suma de voces, sino la generación de inteligencia colectiva, en la que el resultado es superior a la suma de inteligencias individuales; modelos en los que se reconoce la diversidad: tanto de personas, de conocimientos como de experiencias de vida de las personas.

¿A qué nos estamos refiriendo cuando hablamos de modelos organizativos? Pues principalmente nos referimos a la arquitectura y dinámicas de las organizaciones.

La arquitectura representa gráficamente cómo se organiza una determinada entidad, podemos llamarlo también el organigrama. Según sea la arquitectura de una organización facilitaremos que dentro de la misma pasen unas cosas u otras. Dependiendo de los equipos que reconozcamos, las comisiones, los comités... promoveremos trabajar de una forma u otra, facilitaremos unas interrelaciones u otras.

Las dinámicas organizativas son las formas en que se trabaja en una determinada organización. Así pues, en modelos organizativos basados ​​en gobernanza democrática, se promoverán dinámicas que faciliten escuchar las diferentes voces de la entidad, dinámicas de autogestión y autoorganización, dinámicas de tomas de decisiones compartidas, dinámicas de construcción colectiva.

Un aspecto importante en las dinámicas organizativas de las entidades de la ESS es de nuevo, el cómo se llevan a cabo estas dinámicas. Este cómo debe ser acorde con valores como el respeto, la escucha activa, la solidaridad, la sostenibilidad, la equidad entre otros. En este cómo debe haber también reconocimiento de la diversidad, conciencia de la intersubjetividad de las personas, reconocimiento de sentimientos y de emociones, conciencia de poder: de cuáles son los diferentes poderes, de cómo se ejercen; conciencia de rangos, entre otros.

Para mí, esta “forma”, ese cómo, sería el subsuelo de las organizaciones: aquella capa no visible, intangible pero que sustenta y hace únicas a las organizaciones. Debemos ser conscientes de ello, nutrirlo y cuidarlo para que haya un subsuelo fértil, cuidado, seguro, sostenible... un subsuelo que contribuya a hacer perdurar todo lo que hay por encima de él: los propios modelos de organización que estamos persiguiendo.

Así pues, mi idea, visión, sueño para promover la Economía Social y Solidaria es que si las entidades que forman parte de la ESS quieren contribuir a la transformación del modelo económico ellas mismas deben convertirse en parte de la transformación. Y esta transformación debemos verla de forma fractal: las entidades deben transformarse en lo que quieren ver fuera, pero esta transformación debe empezar desde las personas, los equipos, las organizaciones, hasta los ecosistemas de agentes de los que formen parte.

Así que, si queremos una sociedad más equitativa, solidaria, sostenible, con mayor participación, comprometida con la comunidad y promotora del cambio social, las propias organizaciones deben avanzar hacia modelos que también lo sean.

Las entidades de la Economía Social y Solidaria no pueden estar organizadas según estructuras tradicionales y piramidales, con modelos organizativos basados ​​en modelos empresariales que no responden al modelo económico que persiguen. Modelos en los que la toma de decisiones, la innovación, la estrategia está centralizada en unas pocas personas y que a menudo comparten una misma visión del mundo.

Tienen que ser organizaciones basadas en modelos de gobernanza democrática; modelos en los que se ponga las personas y el cuidado en el centro; modelos con voluntad transformadora interna y que impregnen de esa voluntad a su alrededor; modelos con un enfoque ecológico y no mecanicista; modelos ágiles y orientados a responder de forma más rápida e innovadora a la complejidad; modelos que hagan aflorar liderazgos internos; modelos organizativos más comunitarios e inclusivos, permeables con la comunidad para que desde ésta se trabaje el cambio de modelo económico que se quiere promover; modelos más participativos y autogestionados pero no descuidando lo que une, lo común, de las organizaciones: la cultura organizativa, su ADN; modelos organizativos más feministas y menos paternalistas; modelos en los que el trabajo sea algo más que un sueldo, sea una forma de contribuir a la transformación social. 

Acababa esta reflexión compartiendo y explicando brevemente la experiencia de transformación organizativa que desde julio de 2020 estamos impulsando en la Fundación el Maresme, como entidad de economía social y solidaria. En el siguiente vídeo de 2 minutos podrá encontrar una breve explicación de la transformación que estamos construyendo: https://www.youtube.com/watch?v=gnrS5XGSkhE .

 

Siendo conscientes de que es una transformación lenta, pero deseando que perdure en el tiempo. Los cambios profundos no pueden ser rápidos, sino que deben arraigar con fuerza en un subsuelo fértil, cultivado y muy cuidado. Deseando ser una semilla más del cambio que queremos ver fuera.

 

 En el siguiente enlace puede ver la ponencia entera:

https://www.youtube.com/watch?v=VRiI8wqFCCw&t=570s


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Algunas lecturas inspiradoras:

DARCELES, Maite (2009). Guías para la transformación. BAI, Berrikuntza Agentzia = Agencia de Innovación. 

FANTOVA, Fernando (2017) Manual para la gestión de la intervención social. Editorial CCS

LALOUX, Federic. (2016). Reinventar las organizaciones. Garra.

MANENT, Ariadna & Fantova, Fernando (2020). " Transformación Organizacional e Inclusión Comunitaria ". Ley de Engel ( www.lleiengel.cat )

MARCO, Lluís (2021): “El poder y los procesos de transformación organizacional” http://www.hobest.es/blog/el-poder-i-els-processos-de-transformacio-organitzacional

MINDELL, Arnold (2004). Sentados en el fuego: Cómo transformar grandes grupos mediante el conflicto y la diversidad . Icaria Editorial.

VAZQUEZ, Alfonso. (2000). La imaginación estratégica, Granica.


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